ACAMPADOS POR LA VIDA

Carmen M. Padial para TdE/Hasta hace poco yo pensaba que los talleres eran lugares donde se enseñaba a construir cosas, es decir, que eran lugares donde te enseñaban a aportar habilidades sociales o laborales. Pero he tenido la desgracia de comprobar que existen talleres para aprender a asesinar.

En la Puerta del Sol, cuna del movimiento popular llamado 15M, acampados o indignados, el cual se nutrió de algunos de los manifestantes de la convocatoria que el movimiento Democracia Real Ya (DRY) realizó ese mismo día, es a día de hoy lugar de encuentro para todo aquel que desee hacer una reivindicación. Actualmente hay residuos de lo que fue esa especie de escisión de DRY, un lugar emblemático, no solo de Madrid, sino de España. Apenas queda ya una mesa de información sobre el movimiento, pero a esa protesta primera se une la de otros.

Actualmente, en la Puerta del Sol, existe un grupo de indignados que se hacen llamar “Acampados por la vida”, como su propio nombre indica, están ahí luchando por la vida, por el derecho a la vida. Y tienen todo el derecho, y personalmente opino que el deber, de estar ahí, dando voz a los que no la tienen, y dando fuerza para luchar por sus derechos, a los que son los más débiles animales de la creación al nacer, el ser humano.

Allí está ese grupo de valientes, importa poco la afiliación de derechas o izquierdas, hablamos de bebés, hablamos de seres indefensos. Hablamos de la continuidad de la vida, hablamos del valor que una sociedad le da a la vida.

Este grupo de personas lleva una semana ahí, informando y recogiendo firmas, luchando por otros seres humanos, desconocidos, para que tengan las mismas oportunidades y derechos que ellos mismos tuvieron cuando aún no habían nacido. Luchan por bebés anónimos, pero una lucha que repercute en todos ¡Todos!

¿Hermoso verdad?

Pues hay a quien le molesta eso, hay a quien le sale tal urticaria el hecho, que se lanza a hacer un taller, pero no un taller para aprender a construir o arreglar como pensaba yo que eran los talleres. La habilidad que se adquiere con estos “talleres” es la de matar, ya que como su propio nombre indica: “Taller feminista sobre el derecho a abortar” hay poco más que añadir.

El lunes 11 de julio a las 20h en la Puerta del Sol se celebrará un taller feminista sobre el derecho a abortar, es decir, donde otrora se defendía el pan del pueblo español, ahora se defenderá el matar al futuro español.

¿Porqué no un taller para la prevención de embarazos no deseados? Digo yo…, ¿no es más sencillo y mucho menos costoso para una seguridad social, que cada día es menos social, y menos segura, apostar por la prevención en vez del asesinato?

El “taller” será realizado por varias personas del grupo de feminismos y las exposiciones y resolución de dudas y preguntas las dará Empar Pineda.

Curioso que una señora de ideología más que confesa, hija del antiguoMovimiento Comunista (MC) partido que surgió de una escisión de la “oficina política” de Euskadi Ta Askatasuna (ETA) dirigida por Patxi Iturrioz y Eugenio del Rio. El MC tuvo como miembros de la dirección de la organización a Eugenio del Río, Patxi Iturrioz, nuestra ponente en este taller pro abortista Empar Pineda, Javier Ortiz y los hermanos Javier e Ignacio Alvarez Dorronsoro.

Alguien con semejante historial a sus espaldas no podía ser pro vida, eso me es obvio. Sobre todo porque siendo lesbiana, y por lo tanto, no embarazable, es decir, que no resultará embarazada en sus relaciones sexuales salvo que vaya a inseminarse, y creo yo que en ese caso no se le ocurriría abortar, aunque ya creo que no es fecundable la señora en cuestión por edad…¿con qué potestad habla sobre la vida? Porque hablar del aborto, es hablar de una vida que se extermina, se elimina.

Entiendo que este taller ha nacido, o mal nacido, para hacer “sombra” al movimiento de los acampados por la vida, entiendo que para la intolerante ultraizquierda es inadmisible que otras personas deseen defender posturas que no comparten ellos. Entiendo que hay a quien le “jode” que se siga defendiendo la vida, y que estos acampados por la vida, puedan hacer correr su espíritu por los viandantes y ciudadanos que a ellos se acerquen. Entiendo que defender y propagar el espíritu pro abortista, es prioridad para una lesbiana ¿? Entiendo que para una feminista confesa y militante, aniquilar la esencia de la mujer sea prioritario. Añadiré que creo que es una especie de terrorismo hacia el hombre, que no puede decidir si se mata a su hijo o no, y que encima queda como un mero objeto espectador y pagador, ante algo que es solo al 50% suyo, y solo a la hora de abonar pensiones y nada más.

La intolerancia, la discriminación, las supremacías sexistas, el odio, la muerte y la censura están en las manos de los que pregonan y se pregonan como limpias. Están ahí, al otro lado de las ideas, esperando que nada se les vaya de sus sucias manos.

Y que nadie empiece a ensuciar toda una expresión de rebeldía de un pueblo por culpa de unos grupúsculos que solo buscan manipular y llevarse a su terreno a gente que no les conoce. Que en un cesto de manzanas haya una podrida, no nos hace tirar todo el cesto, tan solo hay que señalar y apartar la que puede dañar al resto, antes que todos acabemos sirviendo de abono en el huerto del amo supremo.