El Presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha tachado de “terroristas” a la “mayoría de los pro-vida”, según informa Lifenews, que ha estudiado un documento titulado Department of Homeland Security.
El manual contiene una lista de las “motivaciones ideológicas” que pueden llevar al terrorismo y entre ellas incluye, por ejemplo, el “antiabortismo”, el “anticatolicismo” y a los que se oponen a la energía nuclear.
No es la primera vez que la administración Obama tilda de “terroristas” a los americanos contrarios al aborto. En enero de 2010, un video gubermental de prevención de riesgos incluyó a los defensores de la vida en la lista de los grupos terroristas “de mayor peligro en EEUU”. Los “antiabortistas” comparten tribuna con células anarquistas (“antiestado”).
En 2009, la administración Obama diseñó un diccionario de términos terroristas llamado “Domestic Extremism Lexicon”, donde se habla del “extremismo antiabortista”. También, se dirige a ellos como “racistas”, “violentos” y promotores de “actos criminales”, aparte de situarlos al lado de núcleos “antisemitas”.
Es cuanto menos curioso que este africano afincado en la Casa Blanca tache de "terroristas" a los que nos oponemos al aborto, excepto en casos puntuales excepcionales, siendo uno de los muchísimos presidentes que a lo largo de la historia han practicado, con más o menos intensidad, la que, posiblemente, sea la más atroz forma de terrorismo, nos referimos al terrorismo de estado. Esta práctica terrorista "legal" está muy extendida por el mundo occidental en la actualidad y podríamos destacar como países y/ o estados destacados en su práctica, precisamente, a EE.UU y a sus amigos de Israel.
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