Os prometemos que son muchas las veces en que hemos hecho propósito de enmienda y hasta hacemos acto de contrición para no ser tan descarados a la hora de mostraros la cruda realidad. Sin embargo, la realidad nos supera, los excesos del poder nos enervan y la arrogancia de la piara de tiranillos que nos gobiernan hace hervir nuestra sangre hasta el punto de intentar, con estas pocas líneas, provocaros un violento despertar ante lo que está pasando. Como pretendiendo cogerte por los hombros y sacudirte violentamente para salvarte de esta acomodaticia catatonia en la que estamos sumidos para mostrarte una única realidad: ¡ NOS ESTÁN ENGAÑANDO !
Es así de simple, nuestros gobiernos nos engañan y la UE, ese déspota que al igual que Gadafi se inviste de un respaldo popular del que carece, le está engañando con absoluto descaro, sin tapujos, sin pretender siquiera aparentar un ápice de legalidad.
Ayer, en la cumbre de los 27 arrogantes celebrada en Bruselas, a salvo de la indignación ciudadana tras un muro de alambradas y de esos policías que han quedado reducidos a pretorianos de los nuevos tiranos, se planteaba la "decepción" portuguesa y la factura de 75.000 millones que vamos a tener que cubrir, además de preguntarse si España iba a ser el siguiente en reclamar otra cantidad multimillonaria del dinero de todos para satisfacer la avaricia de la banca. Porque es de esto de lo que va todo. No estamos salvando a países, ni ayudando a sus habitantes, sino salvando a sus bancos y enriqueciendo a sus ricos.
El problema portugués es que gran parte de su deuda pública ha sido comprada por bancos españoles, principalmente el Santander (38.000 millones de euros), el Popular (10.900 millones) y el BBVA (7.600 millones), por lo que, según nos dicen, el impago portugués arrastraría a nuestro país. Es mentira. El impago portugués arrastraría a esos bancos españoles, no a España, y esos bancos tendrían que hacer frente a las pérdidas de su negocio, como hace cada uno de nosotros con nuestra economía familiar y/o privada. Más aún, tendrían que explicar a sus clientes pr qué han utilizado el dinero que se les ha dejado en depósito para realizar arriesgadas inversiones especulativas para las que no estaban autorizados. Y caso de no poder devolver el dinero que han cogido y que no les pertenece, los propietarios de esos bancos deberían ser detenidos, juzgados y encarcelados.
Pues no. Al contrario; se monta una cumbre en Bruselas-que cuesta millones de euros- para ver qué podemos hacer para garantizarles a esos bancos la devolución del dinero que no les pertenece y de los multimillonarios intereses con los que si se quedan. Y tanto el capital como esos beneficios bancarios los vamos a pagar los europeos, incluyendo a los mismos españoles que, siendo clientes de esos mismos bancos, han financiado con su dinero este apaño de trileros.
Esto es una estafa en toda regla, como lo es el FROB y el fondo de rescate de la UE que ahora, además, va a ser permanente.
Por favor sentiros sacudidos y despertad del letargo porque nos están robando delante de nuestras narices.
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